En 1988, apenas había alrededor de 60.000 computadoras con conexión a Internet en todo el mundo, pero Morris atacó por lo menos a más de 6.000. Se trató de un virus de tipo Worm (gusano), cuya característica es duplicarse a través del sistema operativo. Los daños provocados por este virus se estiman cerca de US$96 millones. Fue uno de los primeros grandes ataques.